En Gfima Inmobiliaria estamos preparados para tenerte al tanto de las últimas novedades del sector inmobiliario. La noticia más importante que nos ha acompañado estos meses ha sido la nueva ley hipotecaria. Como agencia inmobiliaria estamos formados y certificados para aplicarla como asesores de ambas partes en todas las operaciones de compra-venta o alquiler. Pero ¿En qué se basa la nueva ley? ¿Qué normas establece? ¿En qué se aplica? ¿Qué excepciones tiene? Sigue leyendo…
El objetivo de la nueva ley
El objetivo de la nueva ley reguladora de los contratos de crédito inmobiliario (Ley 5/2019, de 15 de marzo) es recuperar la confianza de los prestatarios. Para ello, incluye aspectos para potenciar la seguridad jurídica, la transparencia y la comprensión de los contratos y sus cláusulas. Además, busca el equilibrio entre las partes.
Esta ley se encarga de aplicar en España lo establecido por la Directiva Europea. Por un lado, apunta que la crisis financiera ha demostrado que el comportamiento irresponsable de quienes participan en el mercado puede perjudicar el mercado hasta el punto de socavar los cimientos del sistema, lo que puede ser muy grave a nivel social y económico.
Pero ¿Qué problemas puede sufrir el mercado? La Directiva Europea señala los provocados por la irresponsabilidad en la concesión y contratación de préstamos o por el comportamiento inadecuado de los participantes en el mercado, incluidos los intermediarios de crédito.
Además, intenta a equilibrar las partes: prestamista y prestatario. No solo hay que dar información al cliente, la ley exige a la parte dominante en esta relación que, como profesional, tenga un plus de responsabilidad con el prestatario.
La ley establece normas de protección para todas las personas implicadas en préstamos que estén garantizados por hipoteca u otro derecho real de garantía sobre bienes inmuebles. Para ello, establece normas de transparencia: evaluación de la solvencia y normas de conducta aplicables a la actividad de prestamistas, intermediarios, representantes y asesores.
Además, esta ley se refiere indistintamente a préstamos y créditos. Sin embargo, no se aplicará a préstamos concretos como estos los concedidos por un empleador a sus empleados o los concedidos sin intereses y sin ningún otro tipo de gastos. Para más información, otros supuestos, detalles y excepciones lee la ley completa aquí.